domingo, 8 de febrero de 2015

Memorias pasadas


Ha abierto los ojos dos minutos antes de que le sonara el despertador. Cada lunes le pasa igual, dos minutos antes de las ocho de la mañana se despierta y ya no se puede volver a dormir, sólo que hoy lo ha hecho agitado por el ruido del viento. Toda la noche ha oído cómo las ramas de los árboles que rodean su casa se agitaban y ha notado cómo se colaba un ligero soplido por debajo de la puerta, una voz ronca que resonaba en todos los rincones de la habitación, como si detrás del armario o debajo de la cama se escondiera un hombre alto y gordo con un altavoz, susurrando y gritando a la vez. Sin querer se está volviendo a dormir pero lo que le despierta, a las 8 de la mañana del lunes 2 de febrero, no es el despertador: es la ráfaga de viento más fuerte que ha oído nunca. Abre los ojos y mira aterrorizado a su alrededor.

Se da cuenta de que el viento que azota su casa no es normal y decide ir a echar un vistazo al exterior de su casa, se coloca sus sandalias y se enfunda su bata de dormir , enciende su vieja lámpara de aceite con la que apenas puede percibir alguna oscura y confusa sombra a no más de un metro de su cara. Camina un poco a ciegas intentando evitar chocar contra alguna puerta o mueble con el fin, de encontrar el interruptor que de vida a la habitación. Su perro aullaba con la voz un poco ronca, como antaño lo hacían los lobos que con sus aullidos ¡Auhhh!, Helaban la sangre a más de una desventurada alma en medio de la noche. Al final descifró la posición de la caja del interruptor y dispuesto acabar con aquel enigma el cual le había llevado a levantarse a observar lo que estaba pasando, recordó el porqué de la braveza del viento.

Tan sólo era la nueva cúpula, a modo de escudo que habían implementado en su hogar , la cual protegía toda la casa y desviaba el viento huracanado de las tormentas de arena alrededor de ella. Por un momento echó a llorar desconsolado como un niño pequeño al recordarse a sí mismo que vivía en la nada, como miles, incluso millones de personas, en el desierto.

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